SABADO 15 DE ENERO DEL 2011 12:03 PMUn profesional buscador de talentos de irratia buscaba una noche del año 2010 un talento que pudiera ocupar un lugar y desempeña una buena posición antes la que representaba en el momento
Al paso de unos meses el cazador de talentos buscando entre las madrigueras y las faldas de las montañas encontró un talento y este a su vez trajo consigo otro que a pesar de ser menos brillante antes la sociedad era más valioso por el múltiple trabajo que realizaba.
Al cabo de unos cuatro meses los dos talentos en medio de tropezones fueron un verdadero dolor de cabeza a pesar de que el buscador que los había capturado nunca quería perderlos.
Una noche el capturador se dio cuenta de que los talentos nunca fueron los que considero y mucho menos que no había valido la pena de haber limpiado dos pedazos de metal y haberlos convertido en lingotes de oro que brillaban de lejos, esto por que los metales ya precioso mas que hacer una buena labor se habían desquiciado del camino y hasta había arremetido violentando las reglas del juego y aun así el capturador no quiso desaparecerlos como pudo haberlos hecho.
A final el capturador se dio cuenta que los talentos no podían dejarse rodar otra vez ala orilla de la barranca de donde salieron por que allí nuevamente se convertirían en grandes basuras como lo fueron y de las cual se presumía que no habían salido según su actitud y el cazador es obligado renuncia a cazar y sus funciones fueron abandonadas para no tirar a la calles dos ignorantes talentos que no sabían ni donde estaban.
La moraleja sáquela usted mismo, arme el rompe cabezas.
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